Una historia llena de magia en la América poscolonial del siglo XIX. Sara Daniela deja la vida citadina y bulliciosa de Puerto Málaga para mudarse a la serenidad y sencillez del entorno rural de la sierra, cerca del pintoresco pueblo de Mesaltepe. Aunque recibe el cambio con reticencia, ahora reside en la solariega casa mayor de Ribera del Río, una hacienda cafetalera rodeada por un sagrado e indómito bosque, habitado por animales salvajes y dueño de la vista de un volcán activo. No obstante, la paz en que vive tiene un precio y un periodo de gracia -la mansión le ha heredado una maldición.
Además de enfrentar brujos y maleficios, ella debe burlar la falsedad de galantes pretendientes de su jovial beldad, pero también de su abolengo. Pasiones carnales y celos terrenales se enredan con sucesos sin explicación, mientras las inocentes percepciones de los poblanos tejen interpretaciones peligrosas y confusas del acaecer diario de la comunidad. La dualidad de ser amada y al mismo tiempo ser víctima del odio ronda la novedad de la protagonista.
La novela está impregnada de encantos y tradicionales delicias, finos vestuarios y costumbres, nobles caballos, pero también de la prístina belleza de la naturaleza. Los personajes te sumergirán en sus emociones, por igual en el suspense de sus vivencias. Los relatos y episodios, ambientados en la época, reflejan tanto la realidad histórica como el mágico realismo latinoamericano más actual.
Con ojos de artista aprendí a ver y reconocer la inmensa riqueza visual que nos brinda el mundo, recrear y construir esas imágenes en mi mente, y ahora, al escribir, solo describo las escenas que veo en mi imaginación.
-Jorge Paniagua, nicaragüense, artista plástico, diseñador y fotógrafo en mágica incursión en la literatura.