Llamas Gemelas

"Llamas Gemelas, el poder de la alquimia"

Una de las enseñanzas que aprendemos en Llamas Gemelas, el poder de la alquimia es que los mitos nos brindan el cambio constante de todo. Cada ser se modifica una y otra vez tendiendo a constituir a un tiempo diversas posibilidades de ser, junto con la tendencia única de todo lo creado: La búsqueda del amor. Los rituales son los contenedores psíquicos de tales transformaciones. Los rituales contienen y mantienen a cada ser para que no se diluya al transitar de una forma de ser a otra. Cuidar de los rituales, es una acción que constituye a quien lo hace, en sacerdote o sacerdotisa. Los cuidadores de rituales son almas de luz, algunos son ascetas, otros narradores de historias o alquimistas de momentos del alma, pero
todos ellos, todas las almas de luz tienen algo en común: ritualizan, efectuando modificaciones radicales, es decir, trabajan para el amor.
Gaby Gallegos O. en Llamas Gemelas, el poder de la alquimia, recrea a través de múltiples narraciones, una historia central, fascinante, sucedida en la dimensión de lo eterno, el amor. Ritualizar es abrir una puerta al reencuentro de las almas complementarias, pasionales, amistosas, concordantes. Su recorrido abre puertas de todos los tiempos y lugares, haciendo que, a pesar de diferencias horarias y geográficas se unifiquen en el encuentro del ser que más se asemeja al arquetipo deseado. Tal vez, los personajes sean distintos a lo que los amantes persiguen, pero en el crisol de los rituales del amor, se funden y renacen con la forma y sustancia deseada por el amante. En estas narraciones, el lector vive en un nivel transpersonal que modifica la naturaleza del tiempo. Por una parte, un segundo puede ser una eternidad; por otra, los contenidos de un segundo pueden extenderse y dar sentido a todos los tiempos. El requisito que se exige para que se de esta transmutación de la esencia del tiempo es el que el proceso se realice en el crisol del amor.
La autora demuestra, en Llamas Gemelas, el poder de la alquimia, que el amor no se ubica en los espacios convencionales. El espacio se reconoce y se extiende desde el interior del hombre, se refleja en el exterior y busca lo infinito. Lo inscrito en el territorio de las almas y del inconsciente encuentra su reflejo en los lugares y continentes que habitamos. De este modo, el amor juega con el espacio y el tiempo transformando en cada historia su sentido. En Llamas Gemelas, el poder de la alquimia los contenidos del libro van aún más allá, mostrando la transmutación del sentido de las cosas y de los hechos. Lo que puede ser motivo de burla para unos, para otros, ser el contenido que sostiene efectivamente la vida del planeta. Lo que podría considerarse en una sociedad como debilidad y falta de capacidad para enfrentar las adversidades, para otra sociedad puede ser la fuerza esencial y poderosa que domina y somete a la adversidad.
Gaby deconstruye el sentido de la lucha por la defensa de la vida y la reconstituye con una mirada fresca, nueva, modelando lo no tocado, lo prohibido y lo rechazado. Donde muchas veces creemos que se encuentra la verdad, habita la mentira. Donde creemos sólo ver hojarasca, se encuentra la semilla de la virtud y de la vida.
Llamas Gemelas, el poder de la alquimia, es la capacidad de transformar en oro espiritual lo sencillo y cotidiano, es la piedra filosofal a la que implícitamente hacen referencia sus narraciones. Éstas, nos orientan como mapas del alma, para que la busquemos en los vericuetos del amor, en los del perdón, en los de la humildad y en la capacidad de renunciar a una mirada cotidiana y cansada de la vida para poder verla, aunque sea parcialmente o en una mínima parte con su luminosidad y por ello poder sospechar la inmensidad de su grandeza.
Eduardo de la Fuente Rocha, Doctor en Psicología.
Del Prólogo del libro: Llamas Gemelas, el poder de la alquimia.