Oscuras entidades legatarias de un pasado infausto perseveran ocultas tras el velo de memorias que la humanidad recusa, en su desesperado y fallido intento por dejar atrás el tormento de revivir la infamia de aquellos años rubricados con sangre, persecución, exterminio y duelo. Incluso en la actualidad, el quimérico y enfermizo afán de los genocidas en pro de alcanzar el predominio excluyente de una "raza pura" constituye, taxativo, el preámbulo para la consecución de un propósito superlativo: el retorno del "Tercer Reich" al poder. Tres componentes invisten condición de imprescindibles dentro del vertiginoso curso de los acontecimientos que en nuestra historia podrían desatar sobre la tierra, nuevas e insospechadas formas de concebir horror Más allá de su común origen con el hegemónico arquetipo ideológico que décadas atrás desencadenara el Holocausto, el constante asedio de amenazas tan fúnebres como inciertas propenden a exponer desnudas las más recónditas y oscuras facetas del alma humana. Ambiciones, instintos primigenios, sombras y dualidades. Rencores, odios, deseos de venganza; someten bajo su intemperancia la estructurada identidad y/o personalidad que tipifica la conducta de los personajes a lo largo de la historia. De forma inevitable, comienzan a suscitarse confrontaciones, actitudes imprevistas o el arbitrio irracional y desmedido de libertades auto consentidas. El secuestro de una joven estudiante universitaria. Su infrahumana victimización a manos de un científico demente y un macabro experimento constituyen el lapidario génesis de una progenie aciaga. Tres factores generando intrigas, saltos en el tiempo, crónicas paralelas, desencuentros, fugas y aprehensiones, asesinatos, manipulación genética, sugestión, terror extremo, trastornos de personalidad múltiple, disturbios cognoscitivos, violencia, ira, pasiones desmedidas, tortura, dolor, anarquía, desolación, amor...simbiosis. Vivencias que nos arrastran sin hálito ni tregua a través de relojes desquiciados marcando el ritmo inverso de un conteo regresivo. Sentencia asaz proterva para la continuidad de la existencia tal y como la hemos conocido. Hasta bordear el propio límite entre aniquilación o subsistencia. Instante en que una revelación impera por sobre incógnitas que no cejan: ¿Qué o quiénes amenazan nuestra existencia? ¿Creación o naturaleza? ¿Nueva especie o mutación genética? ¿Metamorfosis espontánea? ¿Acaso, evolución? Nadie lo sabe aún. Inexorable, la única certeza en el planeta es que "ellos" ...ya están entre nosotros.