About the Book
En un ambiente propio de este siglo, de película, o novela de intriga, policíaca y de ficción, pero con ingredientes y finalidad novedosos, como novedoso y original es el Evangelio y el hecho cristiano, se desarrolla el argumento de esta novela: la santidad por la castidad virginal, hasta el martirio, de un joven homosexual, con sus luchas y crisis, en una sociedad adversa y ridiculizante, cuando no explotadora y farisaica.
Hasta llegar al honor de los, altares para asombro de todos, y aún de la misma Iglesia; y estímulo y consuelo de tantos y tantas, como él, hasta de algunos del clero.
En su proceso de beatificación y canonización fueron testigos, incluso, algunos de sus mayores enemigos.
Ojalá que en estos tiempos de confusión, este ejemplo de valor, ficción aún, pero con visos de verosimilitud, (conozco personalmente un caso real), se haga realidad, posible para tantos y tantas que están apareciendo y proliferando en esta sociedad hedonista que no sabe valorar el placer como medio, bendición y consuelo de Dios en nuestra actual dolorosa condición humana, y lo convierte en un fin en sí mismo, sustituto y sucedáneo del último y verdadero: Dios, felicidad del hombre, para su alma y, también, con su cielo, sí, para su cuerpo resucitado.
Por lo demás, ya el hecho de vivir como un verdadero cristiano, con todas sus consecuencias, es heroico. Que se lo pregunten, si no, a los que se dicen católicos pero no practicantes; a los políticos "cristianos" que votan una ideología contraria al cristianismo por seguir la disciplina de voto, olvidando lo de "dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios"; a los que encienden una vela a Dios y otra al diablo, "por si acaso"; a los que presumen de agnósticos y, luego, asisten a actos de culto, procesiones, etc., porque algo les dice por dentro que pueden estar equivocados y no desechan del todo esa posibilidad, en un acto, débil, por no atreverse a salir de la ignorancia, aunque con cierta buena voluntad.
Como se ve, se confirma lo dicho: estamos llamados, por ser hombres, a imagen y semejanza de algo muy grande, a ser también algo muy grande. Pero muchos se conforman con ser pequeños, a no ahondar en el misterio que nos llama desde el abismo de la verdad y de la felicidad. Nos da vértigo. Nos acobardamos. Es la famosa frase de Pilatos, que lo resume todo: ¿Y qué es la verdad?...Y la tenía delante.
Dani, en las circunstancias más difíciles de la vida, supo ser valiente y se enfrentó a su verdad y a la Verdad: Jesús, Camino, Verdad y Vida.
Y la encontró la suya. Y la de todos.
Y para testimonio de la historia. Es posible para todos, como lo fue para él.
Como Cristo, esta novela será motivo de polémica. Ese es el aspecto heroico de ser cristiano.